Antonella Medici

«Cinéticas del trabajo»

Convocatoria de Artes Visuales Miquel Casablancas 2024 (Mediación)

Durante los últimos años, las nuevas plataformas de reparto, los riders y el fenómeno de las dark kitchen (cocinas fantasma), han sido una de las caras más visibles de la ‘economía gig’ y unas de las máximas representantes de la precarización laboral contemporánea en la ciudad de Barcelona. Se trata de un nuevo modelo económico y laboral que no afecta únicamente a la cuestión rider, sino que también tiene una relación e impacto en el tejido económico y social de los barrios y sus condiciones de trabajo y de vida, produciendo nuevas formas de consumo,colectividades y subjetividades.

El distrito de Sant Andreu no es ajeno a este nuevo paradigma. La actual figura del rider tiene su símil en los ciclistas que transportaban las bobinas entre los cines barceloneses. El cine Odeón, fundado en 1921 en la calle Nadal 2 de Sant Andreu, contaba con ciclistas, generalmente jóvenes y de clases populares, que se encargaban de llevar velozmente las copias de las películas de un cine a otro. Para fomentar el esfuerzo de estos ‘riders cinematográficos’ se llegaron a realizar carreras anuales. Hoy, el algoritmo premia a los riders más veloces y efectivos.

Utilizando como hilo conductor las historias de los cines Odeón, CINÉTICAS DEL TRABAJO, es un proyecto que pretende cartografiar las consecuencias de la «uberización» de los modelos de trabajo y consumo en relación a la comida en el distrito de Sant Andreu. Considerando la cuestión alimentaria como uno de los elementos primarios de cohesión comunitaria y reflejo de nuestras dinámicas sociales, económicas, culturales e ideológicas, este proyecto propone la creación de redes colaborativas y la realización de acciones específicas que, desde la mediación artística, puedan ayudar a imaginar y resignificar políticamente nuestras dinámicas de consumo y nuestros entornos. El fuerte pasado industrial y obrero de Sant Andreu ha conseguido poner el foco de interés en las fábricas y su patrimonio industrial, pero se ha hablado muy poco aún de otras formas de trabajo. La figura rider es el hilo conductor que conecta pasado y presente, trabajo, velocidad y precariado.